De disyuntivas a decisiones
Cuando empiezas a estudiar alguna Carrera de negocios o inclusive de economía, y tienes que tomar Economía 101 lo primero que te ensenan son los 10 principios de la economía. Menciono esto ya que el principio No.1 dice que “Las personas enfrentan disyuntivas”. No hay mejor forma de ver este principio que analizar la situación actual del mundo. La disyuntiva está en determinar lo mejor para un país que enfrenta a una pandemia: elegir entre el bienestar de la salud de la población o el bienestar económico de la misma.
Al enfrentar esta disyuntiva, los mandatarios de todos los países han tomado decisiones basados en sus convicciones, unos determinando que el COVID19 es un simple resfriado, que no va a matar a nadie, por lo que mantenían el país abierto, así como los comercios. Otros simplemente lo mantuvieron abierto, para no afectar la economía. Otros se vieron forzados a cerrarlo, por presiones de seguridad pública, pero abrieron el país lo más rápido posible.
Otros mandatarios cerraron el país por completo, entrando en una cuarentena generalizada, unos con más restricciones que otros, pero con el mismo objetivo: velar por la salud de todos antes que por la economía.
Pero ¿quién tiene la razón? La verdad es que todavía es muy temprano para saberlo. Las cifras de la pandemia todavía no nos dicen mucho, sobre todo cuando hay países que no están contando bien, que no hacen pruebas, que no determinan la razón de la muerte de la gente en su país, etc.
Ya tenemos 70 días en cuarentena (o movilidad limitada), mas o menos, y tanto la economía como la salud mental de la ciudadanía esta bien afectada por el hecho de no poderse mover a su anchas. El gobierno ha hecho un plan para volver a la “nueva normalidad”, ya se puede salir a hacer ejercicios dentro de 1 km de su vivienda, se reactivaron los sábados como día de salir a los hombres, se puede comprar licor de forma limitada, y se sigue midiendo los efectos de la pandemia en Panamá. Esto servirá para ir probando y soltando al resto de los comercios, pero ya estamos cerca de que el país vuelva a producir a un nivel más alto.
¿Qué nos vamos a encontrar en este momento en la economía?
Un desempleo de entre el 15% al 25% que pudiera ir bajando en el momento en que se active la economía y mas gente pueda volver a trabajar, incluyendo los independientes e informales.
Vamos a encontrarnos con un crecimiento del PIB para el 1 semestre de -35% contra el primer semestre del 2019. Esto va a cambiar radicalmente para el segundo semestre, pero difícilmente podremos conseguir un crecimiento del PIB para el año 2020.
Van a cerrar muchas empresas, o no van a poder ni abrir. Muchas empresas ya estaban mal antes de la pandemia y de la cuarentena, y no se van a poder recuperar.
El gobierno se endeudará más, pero nuestro % de endeudamiento no será mas del 50% al final del 2020. Ahora, esta no es una situación solo para Panamá, sino que todos los países han aumentado su deuda a causa de los efectos económicos de la pandemia. Y muchos están por encima del 100% de su PIB.
No creo que los prescolares y las escuelas primarias y secundarias puedan regresar a dar clases presenciales durante el 2020, ya que son un foco de infección enorme. Todas las escuelas tienen que volcar sus esfuerzos a hacer su año escolar de forma virtual, entendiendo que podemos dictar nuestras clases de forma virtual, pero en vivo, lo cual nos permite mantener la calidad de la educación. El reto más grande los tiene las escuelas oficiales.
Los sectores más golpeados en Panamá serían el sector inmobiliario (difícilmente veremos alquileres ni de locales y viviendas durante este año), el sector comercio (especialmente al por menor), y el gobierno en la recolección de ingresos a través de impuestos. El turismo va a depender de su estrategia y de la apertura del país a los turistas, si es que los turistas deciden salir de sus países a “turistear”.
Los sectores con más oportunidad serán el agropecuario, la pesca, la manufactura, que servirán para probar lo que somos capaces de hacer para no depender de nadie afuera (ya que difícilmente se podrán hacer intercambios comerciales como se hacían anteriormente de la misma manera que antes).
Los sectores que tiene retos sería el transporte (a pesar de que el Canal va a sufrir un poco en sus tránsitos, pudiéramos seguir siendo eficientes en el mismo, pero el transporte aéreo si se verá fuertemente afectado), la intermediación financiera (los bancos tendrán que aceptar que tiene que restructurar la deuda de casi todo el mundo para poder seguir adelante), la construcción (especialmente dedicada a los proyectos que el gobierno quiera empezar para mover la economía).
Pero el mismo gobierno tendrá mucho en sus manos apenas que salgamos todos a producir nuevamente.
Despertar la economía a través del empleo. Hay que incentivar a las empresas locales a contratar gente de alguna manera, pero esto es más fácil decirlo que hacerlo ya que dependerá del movimiento de la economía
Por ende, tenemos que volcarnos al extranjero a buscar inversionistas para nuestro país, con buenas campanas de relaciones publicas y de venta del país, que nos permitan atraerlos y que generen empleos.
Este es el momento de terminar de automatizar el estado, para combatir la falta de productividad y eficiencia en el aparato estatal y para atacar la corrupción. LA AIG ha probado que es capaz de esto y mucho más.
Tiene que meterle el diente a la educación virtual, no solo por el tema de la pandemia, sino para realmente atacar el tema de la calidad de la educación.
Hay que modernizar el estado con dos propósitos. El primero es para atacar la corrupción. El segundo es para sacar las botellas, los que no trabajan y reciben dinero, o los que no trabajan, cobran un % del cheque y el resto se lo dan a las personas que le dieron la botella. Y como tercero para ver si por fin ponemos funcionarios que sepan lo que están haciendo o por lo menos tengan idea del tema en el que están trabajando y no que sean cuerpos inertes en esas oficinas públicas.
El gobierno tiene que resolver el tema con la OECD, la UE, las GAFI’s, y cuanta organización este detrás nuestro como si fuéramos narcos. Esto es denigrante. Yo creo que vale la pena evaluar diferentes alternativas, una vez que este tema de la pandemia pase a segundo plano, no solo en Panamá, pero a nivel mundial también.
El otro tema sumamente urgente del gobierno será el de la Caja de Seguro Social. Entiendo que la papa caliente es el fondo del IVM, sin embargo, yo opino que hay que atacar el problema como un todo, con una Ley integral que resuelva el problema a corto y largo plazo.
2020 va a terminan siendo un año muy difícil. Lo que nos quedaría es sobrevivir. Hacer lo que se tenga que hacer para llegar al 2021 listo para darle una vuelta a la economía. Hay que ser recursivos, pensar fuera de la caja, buscar oportunidades que halla dejado la cuarentena, con el propósito de mantenernos en el mercado. Va a ser un trabajo difícil, pero no imposible.