Agencia de Noticias Panamá

Embajador Ruso: Panamá podría beneficiarse del dinamismo de la farmacéutica rusa

Nicomedes Frías G.

nfrias@anpanama.com

(Ciudad de Panamá-ANPanamá)  Oficialmente Panamá y Rusia mantienen relaciones diplomáticas desde hace 32 años, cuando un 29 de marzo de 1991 firmaron un acuerdo los representantes permanentes ante la ONU, César Pereira Burgos por Panamá y Yuli Vorontsov por parte de Rusia.

Ambas naciones primeramente establecieron un consulado en cada país hasta que en marzo de 1995 abre oficialmente la embajada de Rusia en Panamá.  Un año después la embajada panameña inaugura su sede en Moscú, iniciando una nueva etapa de relaciones entre ambos países.

Durante todos estos años, la relación entre Panamá y Rusia incluye tratados sobre los principios de las relaciones, conexión aérea, la ayuda jurídica mutua en los casos penales, acuerdos intergubernamentales sobre las condiciones de supresión de los requisitos de visas para los ciudadanos de ambos países, cooperación en el campo de cultura, ciencia, educación, deporte, turismo y por supuesto intercambio comercial entre ambos países.

La Agencia de Noticias de Panamá, les presenta una entrevista con el actual embajador de Rusia en Panamá S.E. Evgeny Boykov, quien nos brindará los detalles más a profundidad sobre las relaciones comerciales entre Panamá y Rusia, sus exportaciones, las perspectivas sobre nuevos productos para exportación abriendo la posibilidad especialmente en el mercado farmacéutico y más cooperación científica, las afectaciones a sus exportaciones a latinoamérica debido a la pandemia y su consideración sobre la disminución de la producción de alimentos en el mundo debido al conflicto ante Ucrania.

1. ¿Panamá y Rusia tienen pocas relaciones comerciales, pero nos puede indicar qué productos comercializan y cuánto serían sus exportaciones?

Estoy de acuerdo que los niveles de intercambio comercial entre la Federación de Rusia y la República de Panamá todavía son bastantes modestos, pero tienen un amplio margen para el desarrollo.  Según los datos del Servicio General de Aduanas de Rusia, en el 2021 el volumen total de nuestro comercio bilateral aumentó en más de 50% en comparación con el año anterior.  Alcanzó US$64.44 millones, de los cuales una gran mayoría constituye las exportaciones rusas, unos US$61.1.

Cabe subrayar que muchas de estas mercancías tienen pocos sustitutos y contribuyen significativamente al bienestar socioeconómico de Panamá.  En particular Rusia encabeza la lista de mayores proveedores de abonos al mercado panameño:  En el 2021 casi un tercio de todos los fertilizantes importados a Panamá provinieron de Rusia.  Los abonos minerales rusas base de nitrógeno, fósforo y potasio, llevan muchos años en asegurar cosechas viables y abundantes de varios alimentos claves en la dieta básica de los panameños, incluido sobre todo el arroz, otra mercancía que Rusia exporta a Panamá es malta tostada de cebada que se usa para elaborar cerveza, así que es probable que una de las cervezas panameñas favoritas sea producida con malta rusa.

2. ¿Qué oportunidades comerciales ve para que Rusia exporte más a Panamá y que Panamá pueda exportar a Rusia?

Rusia tiene mucho que ofrecer a sus socios comerciales internacionales, nuestro país es uno de los principales exportadores mundiales de petróleo y gas natural, tecnología de energía atómica y exploración aeroespacial.  Nuestra ventaja competitiva es el vasto conocimiento científico combinados con costos moderados de producción que nos permiten ofrecer productos de alta calidad pero relativamente baratos.

Panamá, por ejemplo, podría beneficiarse del dinamismo de la farmacéutica rusa.  Nuestros productores de medicamentos han demostrado su alta efectividad durante la pandemia del Covid cuando elaboraron Sputnik una de las mejores vacunas en contra el coronavirus. Según lo confirman muchos estudios.

Millones de dosis de la Sputnik V fueron exportadas exitosamente a docenas de países del mundo, incluida varias naciones latinoamericanas Argentina, Bolivia, México, Paraguay y Venezuela.

Por lo tanto, estoy seguro de que la experiencia y capacidades de las empresas rusas podrían ser de gran beneficio para el futuro “Hub” farmacéutico regional que el Gobierno de Panamá está creando en el istmo con el propósito de asegurar un mejor acceso a medicamentos a precio asequibles.

En cuanto a las perspectivas de exportaciones panameñas al mercado ruso, los suministros adicionales de frutas tropicales y de café podrían ser de gran interés para nuestros consumidores.  Además, todos los años millones de turistas rusos buscan nuevos destinos, lo que el sector turístico floreciente de Panamá podría aprovechar para complementar a Cuba, México y República Dominicana como uno de los mayores puntos de atracción para el vacacionista ruso en el Caribe.

3.¿Cómo ha superado Rusia la pandemia, tiene números, le ha afectado su economía o exportaciones en latinoamérica?

La economía rusa logró resistir los impactos negativos del Covid, mejor que muchos otros países del mundo.  En el 2020 nuestro PIB sólo disminuyó 2.7%, mientras que las economías de Reino Unido, Japón y EE.UU. por ejemplo, perdieron un 11%; 4.5% y 2.8% respectivamente siendo un 3.5% el promedio mundial. 

Algunos sectores tales como industrias secundarias, la agricultura, la construcción y el comercio al por mayor, incluso crecieron durante la pandemia.  La mayoría de los principales indicadores económicos retomaron sus niveles prepandemia a mediados del 2021 y el desempleo se redujo al mínimo histórico de un 4% a principios del 2022.  Esta recuperación dinámica se debió al carácter relativamente limitado de las restricciones de aislamiento debido a la alta eficacia de las vacunas Sputnik, así como la estrecha coordinación entre las autoridades públicas y los círculos empresariales rusos para mejorar la implementación de las políticas socioeconómicas del Estado.

En este contexto, cabe mencionar también el muy buen desempeño de la economía rusa frente a las sanciones unilaterales sin precedentes que los EE.UU. y sus aliados impusieron contra nuestro país en respuesta a la operación militar especial a Ucrania.  Según han sostenido los propios líderes del Occidente estas medidas están diseñadas no solo para provocar  la “Derrota estratégica” de nuestro país, sino también “hacer sufrir” a su población.  Sin embargo, contrario a los pronósticos apocalípticos de varios organismos internacionales que estiman que la economía rusa disminuyera un 20 a 25% en el 2022, nuestro PIB solo perdió un 2.1%.  Más aún, los exportadores e importadores rusos lograron encontrar caminos alternativos al suministro, al consolidar los vínculos mutuamente provechosos con numerosos socios en el mundo entero.  Y todo esto lo logramos pese a los intentos de nuestros detractores de quebrantar el sistema bancario de Rusia, trastornar sus cadenas logísticas, robar descaradamente nuestras reservas financieras externas.

4. ¿Rusia exporta a América Latina fertilizantes, acero, petróleo refinado y las vacunas Sputnik, la guerra con Ucrania ha disminuido estas exportaciones?

Aunque las estadísticas comerciales detalladas para el año 2022 todavía no están disponibles, los datos preliminares confirman que los niveles de intercambios comerciales entre Rusia y Latinoamérica no han bajado sustancialmente desde el inicio de la operación militar.  Por ejemplo, sabemos que en mayo de 2022 con el apoyo del Ministerio de Desarrollo Agropecuario de Panamá, los proveedores panameños de insumos agrícolas lograron comprar más de 5 mil toneladas de fertilizantes minerales rusos,  Generalmente, observamos con satisfacción que el interés por profundizar interacción fructífera con Rusia por parte de muchos Gobiernos y empresas de la región no solo se ha mantenido,  sino, también, en algunas ocasiones, se ha aumentado en los últimos meses.  En este contexto y dado que el canciller de Rusia, Sergei Lavrov, anunció la reorientación de la política exterior rusa hacia los países de África, Asia y Latinoamérica (muchos de los cuales están listos para cooperar con nosotros sobre la base de igualdad y beneficio mutuo), albergo la esperanza de que en los próximos años se lleve a cabo muchos nuevos proyectos prometedores, incluídos planes de apoyo e intercambio empresarial, así como iniciativas culturales, humanitarias y educativas.

5.¿Según la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (AITA) la pandemia y la guerra entre Ucrania y Rusia han mermado la carga aérea del mundo, ¿ qué tanto es cierto, está de acuerdo con esto?

No cabe duda que las restricciones sanitarias de la pandemia, así como las respectivas interrupciones comerciales afectaron las transportaciones aéreas de manera significativa.  No obstante, en cuanto a los impedimentos aeronáuticos relacionados con el conflicto ucraniano, quisiera llamar la atención a los efectos negativos de las sanciones occidentales contra la industria aeroespacial de Rusia.  Al cerrar su espacio aéreo para las aerolíneas rusas, prohibirles la compra de sus aviones y sus repuestos, los países europeos y norteamericanos efectivamente limitaron el acceso de los proveedores extranjeros a más del 3% del PIB global, lo que corresponde a nuestra economía mundial.  Por lo tanto, la disminución de la carga aérea mundial no es de extrañar.

Cabe subrayar también que Rusia sigue comprometida con el pleno cumplimiento de sus obligaciones, inclusive en la esfera de la seguridad aeronáutica, a raíz del Convenio sobre aviación Civil Internacional de 1944 y otros documentos correspondientes, por lo que las restricciones arbitrarias impuestas contra Rusia por Occidente son totalmente ilegítimas.

6. ¿Cree que la guerra ha afectado la producción de alimentos en el mundo?

Para nosotros, lo que realmente tuvo el mayor impacto en la producción agrícola mundial no fueron los enfrentamientos bélicos de Ucrania, sino una serie de políticas macroeconómicas, agro alimentarias y energéticas de carácter insensato e irresponsable que las élites occidentales llevan años en impulsar a prejuicio de la seguridad alimentaria del planeta.  Dichas políticas incluyen, entre otras cosas, varias medidas prematuras para promover la energía verde que ralentizan el desarrollo socioeconómico global, así como errores en la esfera agroindustrial que desequilibraron el mercado de alimentos. Según lo confirman expertos de la ONU y representantes de los círculos analíticos internacionales, la economía mundial empezó a experimentar problemas relacionados con las citadas decisiones (que se exacerbaron por ciertos desastres naturales y la pandemia del Covid 19) muchos años antes de la fase actual del conflicto ruso-ucraniano.

Contrariamente a las declaraciones de las autoridades de la UE y los EE.UU., las sanciones económicas masivas que se impusieron contra Rusia también empeoran significativamente la seguridad alimentaria en el mundo.  Estas restricciones, como ya he mencionado, crearon múltiples problemas de pago y dificultades logísticas para los exportadores rusos.  Se prohibió el tráfico de los fertilizantes de Rusia a través de los puertos de UE, así como cualquier participación de empresas europeas en el comercio, transbordo y prestación de servicios de seguros a nuestros proveedores.  Tampoco se permite importar a Rusia varios tipos de maquinarias agrícolas europeas que se usan para la producción de cereales y abonos.  Las citadas decisiones del occidente, de hecho, constituyen un intento de restringir el acceso de los consumidores al 15% de las exportaciones de trigo y el 25% de las exportaciones de abonos a nivel global, lo que no puede sino afectar gravemente la situación alimentaria global.

Al difundir acusaciones injustificadas contra Rusia, Washington y sus aliados prefieren callar el hecho de que son precisamente las corporaciones occidentales agrícolas las que sacan el mayor provecho del encarecimiento y la desestabilización de los suministros de alimentos,  Se trata de las llamadas “El Gran cuatro” comercializadoras de cereales (Archer Daniels Midland, Bunge, Cargill y Louis Dreyfus)  cuya tasa combinada en el comercio mundial de alimentos alcanza un 75%-90%.  La expulsión de Rusia de los mercados mundiales de alimentos así como la creciente incertidumbre que rige estos mercados crean condiciones favorables para que las citadas corporaciones continúen sacando rentas adicionales.

Por su parte Rusia hace todo lo posible para cumplir, de forma responsable y diligente, con sus compromisos contractuales internacionales en cuanto a la exportación de productos agrícolas, fertilizantes, combustibles y otros bienes de relevancia crítica.  Entendemos la necesidad de asegurar los suministros de los bienes de importancia social, incluídos los alimentos, en aras del desarrollo socioeconómico de los países de Asia, África, América Latina para alcanzar los índices de seguridad alimentaria y los objetivos del desarrollo sostenible.