Trasnacional de casa de apuestas anunciará expansión en Panamá
(Ciudad de Panamá-ANPanamá) La casa de apuestas trasnacional Sportium anunciará mañana miércoles la expansión de sus operaciones en Panamá, en donde desembarcó hace casi 3 años en alianza con la española CIRSA, presente en 31 casinos del país centroamericano.
“Sportium, una multinacional de Casa de Apuestas Nº 1 en España, amplía su red de locales comerciales” anuncia y convoca en su mensaje “para hablar acerca de su plan de expansión a nivel nacional y del desarrollo económico que traerá al país”.
En 2007, según su historia, nació la joint venture Sportium, formada por las compañías CIRSA y Ladbrokes Coral Group (británica), para operar las apuestas deportivas presenciales en España. La multinacional CIRSA es la empresa líder en juego a nivel español y Latinoamérica, mientras que Ladbrokes Coral Group cuenta con más de 100 años de trayectoria en el sector de las apuestas deportivas a nivel internacional.
Sportium, con sede principal en San Cugat del Vallés (Barcelona), tiene máquinas expendedoras en casinos, una página web y una aplicación para móviles para efectuar las apuestas en al menos 25 distintos deportes y otras actividades lúdicas.
En 2016 inició su internacionalización en Latinoamérica operando en Panamá. En 2017, se instala en Colombia, con un ambicioso plan de expansión que se suma a su avance en las Comunidades Autonómas españolas. Su presencia actual llega a Argentina, Costa Rica, México, Perú y República Dominicana en América.
En Sportium “tenemos el know how de la empresa líder en apuestas del Reino Unido, Ladbrokes Coral Group, una compañía centenaria que pone a disposición de los clientes todo el conocimiento y seguridad del sector. Esto nos ha permitido disponer de un equipo de Trading propio del que depende buena parte del éxito de los resultados. De esta forma, logramos un mejor ajuste de las cuotas y un conocimiento más profundo de los mercados con mayor demanda en España”.
Además, cuenta “con el know how de CIRSA (en Panamá desde 1991), la multinacional líder en España en juego y ocio, que dispone de una extendida red de retail. El soporte de esta infraestructura y el profundo conocimiento del sector en el país, nos permite disponer de todas las herramientas tecnológicas y comerciales para desarrollar un negocio de éxito”.
Con presencia en bares con máquinas recreativas tradicionales, ubicados en Calidonia, Dorado, Aguadulce y Centro Comercial Los Andes Mall, y en casinos como Bingo 90, Lucky Games, Majestic Casino Panamá, Fantastic Casino, con 28 salas estratégicamente ubicadas en las principales provincias de Panamá, ofrece a los visitantes sus servicios de apuestas.
El secretario ejecutivo de la Junta de Control de Juegos (JCJ) de Panamá, Manuel Sánchez Ortega, informó recientemente que entre enero y agosto de 2019 se apostaron 1.425 millones de dólares, que representa una caída de 45.000 dólares en comparación con igual periodo del año pasado.
Del monto apostado hasta el mes de agosto, 75,6 millones de dólares se hicieron en mesas de juego, con una caída interanual de 15 %, mientras que las apuestas en salas de máquinas tragamonedas tipo A bajaron un 2,6 % hasta los 1.277 millones de dólares. De todas las variedades de juego de azar regulados por la JCJ, la única que registró un saldo positivo fueron las apuestas en eventos deportivos que subieron un 13,2 % hasta los 33,6 millones de dólares.
En los ocho primeros meses de 2019, 1.116 millones de dólares fueron pagados en premios y a los operadores les quedó un ingreso bruto de 259,6 millones de dólares.
En ese momento Sánchez explicó que las estadísticas reflejan una caída del 47 % en las apuestas de las mesas de juego desde que se estableció, en 2015, el impuesto del 5,5 % para financiar el incremento a los jubilados y pensionados, por lo cual pretende la eliminación de ese tributo a esa modalidad y que los jugadores que utilizan las máquinas tragamonedas tipo A y C, así como las apuestas en eventos deportivos, seguirán pagando esta tasa.
El Estado recibe unos 53 millones de dólares anuales por la aplicación del 5,5 %. Con la exoneración a las mesas de juego se calcula que la recaudación caerá unos 3 millones de dólares.