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Gobierno de Panamá recibe avalancha de consultas de comunidad china sobre política tributaria

(Ciudad de Panamá-ANPanamá) El gobierno de Panamá recibió este viernes una avalancha de consultas de la comunidad china sobre la política tributaria y como remediar los vacios y escollos que encuentran.

Funcionarios del gobierno explicaron los beneficios de la amnistía tributaria que empezó a regir el pasado 15 de octubre y vence el próximo 29 de febrero para que aprovechen los beneficios de condonación de multas, recargos e intereses, o incluso hacer un arreglo de pago para aprovecharla.

Aunque la participación de los ciudadanos de origen chino o sus descendientes panameños fue escaza comparada con la capacidad del recinto dispuesto, el presidente del Centro Cultural Chino Panameño, el empresario Fermín Chang, asistió con parte de su junta directiva y la seguidilla de consultas y problemas expuestos dinamizó el encuentro.

La comunidad china en Panamá, con unos 300.000 miembros, es considerada la más grande del país. Los primeros llegaron en 1854 para la construcción del ferrocarril transístmico que unió los puertos del Caribe y Pacífico panameños al calor de la fiebre de oro de California (EE.UU.), recordó Chang.

Funcionarios del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) explicaron detalladamente los beneficios de acogerse a la amnistía tributaria, que incluye todos los impuestos, y además se explicó el proceso obligatorio de facturación que rige en Panamá para los que ofrecen bienes o servicios, los mecanismos electrónicos para efectuarlo y las sanciones a quienes no cumplen, que van de 1.000 a 15.000 dólares de multas, dependiendo de la gravedad o reincidencia.

La principal actividad de esta comunidad es el comercio al por mayor y menor, la industria manufacturera y la textil, que en conjunto “son menos de 100.000 negocios”, calculó Chang al ser consultado por ANPanamá.

El director de Ingresos de Panamá, Publio De Gracia, valoró el “empuje” de la comunidad china en el país para dinamizar la economía y especialmente en el comercio, alimentación y los servicios, por lo tanto apostó por un acercamiento y comunicación con los empresarios y dejar “como lo último el acudir a poner multas”.

“Nosotros tenemos que recaudar, hacer cumplir la ley, y ustedes tienen que vender, generar negocio, entonces lo que queremos es que conozcan todos los procesos, queremos que sean parte, lo que menos quiero es multar, lo que queremos es que cumplan voluntariamente” las normas fiscales, contando con la información correcta “para que no tengan ningún tipo de duda”.

Varios miembros de la comunidad expresaron las numerosas dificultades que encuentran en la Dirección General de Ingresos (DGI) con respecto al pago de impuestos y el uso de los equipos fiscales electrónicos, sobre lo que los funcionarios se comprometieron a esclarecer cada caso.

También sobre la falta de facturación de sus proveedores para poder demostrar sus gastos reales se generaron una lluvia de consultas, por lo que De Gracia se comprometió a reunir a los que venden las maquinas de facturación electrónica y examinar las reglamentaciones vigentes para actualizarlas y recordarlas para mejorar la recaudación.

De Gracia les exhortó a que “no caigan en pagar coimas” y les pidió ayuda para conocer de esos casos. “¡Denúncienlo!”, enfatizó.

Chang resaltó la riqueza del intercambio de información y la “confianza” que reinó en el encuentro porque la percepción es que “hay un cuco” en la DGI.

El director de Ingresos expresó a ANPanamá estar “gratamente sorprendido” por las numerosas consultas y su contenido, de parte de los comerciantes y prometió celebrar una segunda cita “y las que sean necesarias” para mejorar la comunicación y detectar anomalías que corregir o despejar dudas por desconocimiento, como la facturación de los informales que abastecen a los empresarios que si tienen que rendir cuentas de sus ingresos y gastos por obligación.